En el año 2009 se publicó el primer trabajo que permitió entender cómo detener el calentamiento global: existe una relación lineal entre el aumento de la temperatura y la masa total neta acumulada de CO2 en la atmósfera. De esta forma, para evitar que la temperatura de la Tierra siga aumentando, debemos detener el aumento de la masa total neta de CO2 en la atmósfera. Para ésto, se requiere que se alcance un balance entre emisiones de CO2, asociadas principalmente a la quema de combustibles fósiles, y capturas de CO2, asociadas al consumo de los ecosistemas terrestres y marinos.
Al balance entre emisiones y capturas de CO2 se le conoce como neutralidad de carbono, y a la masa total neta por emitir para alcanzar un determinado aumento de temperatura, se le conoce como presupuesto de carbono.
En el acuerdo de París alcanzado el año 2015 en la COP21, se puso como meta limitar el calentamiento global en un valor muy por debajo de los 2oC, para así restringir la crisis climática que amenaza la permanencia de nuestra civilización. Para lograr este límite se requiere que al 2030 se reduzcan las emisiones a la mitad de las emisiones de hoy, y al 2050 debiéramos alcanzar la neutralidad de carbono.
Aún cuando se necesita un profundo cambio en la sociedad en su conjunto (cambiar los patrones de producción, cambiar a economía circular, entre otros), éste no se logra sin cambios a nivel de las personas, dado que son finalmente los individuos los que demandan los bienes y servicios que explican las emisiones de CO2. Es así como una forma para facilitar estos cambios individuales, sería poner el presupuesto global de carbono en una perspectiva individual, definiendo, por ejemplo, un presupuesto anual de CO2 por persona. Bajo esta mirada, se estima que el presupuesto anual de CO2 por persona no debería superar las 5.0 tonCO2eq/año y debería ir disminuyendo hasta llegar a cero en el año 2050.
A partir de esta información, podemos leer de mejor manera el resultado de herramientas que permiten medir nuestra huella de carbono; como también, tomar conciencia de nuestras decisiones respecto a nuestra cuota máxima de carbono anual. Por ejemplo, llenar el estanque del auto con 50 litros de bencina a la semana, equivale a 6.7 tonCO2eq anuales, valor superior al presupuesto anual de CO2 por persona, por lo que deberíamos compartir el vehículo para no superar nuestro presupuesto anual de 5 tonCO2eq. De igual forma, consumir 1 kilo de carne a la semana, es equivalente a 0.70 tonCO2eq anuales en el caso de carne de vacuno, pero si la carne es de cerdo el equivalente es de 0.17 tonCO2eq anuales. Comprar un auto pequeño, por otra parte, ocupa casi la totalidad de nuestro presupuesto anual, mientras que un auto grande nos deja con una deuda por 5 años en nuestro presupuesto. Otros ejemplos se detallan en la siguiente tabla.
Acción | Emisiones | % presupuesto anual de referencia (5 tonCO2/persona/año) |
Llenar auto con 50 litros de bencina/semana | 6720 kg CO2 | 134% |
Consumir 1 kilo carne semanal de: | ||
Vacuno | 696 kg CO2 | 13.9% |
Cerdo | 169 kg CO2 | 3.3% |
Pollo | 187 kg CO2 | 3.7% |
Comprar un auto nuevo: | ||
Pequeño | 4.9 ton CO2 | 98% |
Grande | 28.7 ton CO2 | 574% |
Viajar 550 km en: | ||
Avión | 410 kg CO2 | 8.2% |
Tren | 98.4 kg CO2 | 2.0% |
Vuelo Londres a Hong Kong | 3.77 ton CO2 | 75.4% |
El rol de la demanda de las personas en detener el aumento de la temperatura de la Tierra fue estudiado en el último informe del grupo 3 del IPCC, donde se plantean respuestas diferenciales según sea el nivel de ingreso económico de las personas. En particular, se reconoce que el 90% de la población de menores ingresos emite sólo el 48% del total de emisiones, mientras que el 10% de mayores ingresos emite el 52% restante, y se destaca que el 1% de las personas de mayores ingresos emite el 15% del total de emisiones globales. De esta forma, para el primer grupo del 90% de la población, el foco debiera estar puesto en que puedan satisfacer sus necesidades mediante tecnologías limpias, mientras que para el 10% restante de mayores ingresos, el foco debiera estar en reducir la demanda actual de bienes y servicios.
En conclusión, para frenar el calentamiento global se requiere de un compromiso individual, focalizado en la reducción de los niveles de emisiones por persona, para llegar a niveles de emisiones netas iguales a cero, y de esta forma alcanzar la neutralidad de carbono en la atmósfera al 2050. Esta es una oportunidad para repensar nuestra forma de vida, siguiendo la lógica de una economía circular, al mismo tiempo que regeneramos los ecosistemas dañados para aumentar la captura del CO2 atmosférico.
Referencias:
- Meinshausen M, Meinshausen N, Hare W, Raper SCB, Frieler K, Knutti R, et al. Greenhouse-gas emission targets for limiting global warming to 2°C. Nature. Nature Publishing Group; 2009;458: 1158–1162. pmid:19407799 https://www.nature.com/articles/nature08017
- de la Fuente A, Rojas M, Mac Lean C (2017) A human-scale perspective on global warming: Zero emission year and personal quotas. PLoS ONE 12(6): e0179705. https://doi.org/10.1371/journal.pone.0179705
- UNFCCC. Conference of the Parties (COP). Adoption of the Paris Agreement. Proposal by the President. Paris Climate Change Conference—November 2015, COP 21. 2015. p. 32. FCCC/CP/2015/L.9/Rev.1 https://unfccc.int/resource/docs/2015/cop21/eng/l09.pdf
- Friedlingstein, P., et al: Global Carbon Budget 2021, Earth Syst. Sci. Data, 14, 1917–2005, https://doi.org/10.5194/essd-14-1917-2022, 2022.